Javier Castellano es periodista especializado en comunicación institucional y corporativa. Con 29 años de experiencia a la espalda en medios de comunicación, principalmente radio, agencias y prensa escrita, Castellano posee conocimientos de estrategias de comunicación como fuente de información y como transmisor.
Durante su etapa estudiantil sacó notas bajas en selectividad, teniendo que estudiar periodismo, su tercera opción como futura carrera universitaria después de empresariales y económicas. Durante sus estudios de periodismo quiso adquirir experiencia dentro del sector, entrando en InfoRadio UCM, la radio de la Universidad Complutense de Madrid. Además, aceptó unas prácticas no remuneradas en una emisora de radio, cuyo horario era de 2 a 4 de la mañana. Un año después, realizó una serie de prácticas en la Agencia EFE, donde comenzó a escribir sin opinar.
Su trayectoria laboral es muy rica y, sobre todo, propia de un inconformista. Antes de ser Director de Comunicación en GILMAR Consulting Inmobiliario pasó por crear su propia agencia de comunicación, la cual duraría un año, para después trabajar en el diario El Mundo, del que más tarde se marcharía voluntariamente al no querer preguntar a un padre cuyo hijo había muerto si pensaba denunciar al ayuntamiento. A los 29 años pasaría a ser jefe de prensa del Ayuntamiento de Boadilla, puesto que eventualmente abandonaría para no volver a codearse con personalidades del mundo de la política.
Este año Castellano cumple 7 primaveras con GILMAR, su cifra más estable dentro de una empresa. Según él, esto es así porque le gusta su trabajo. Dejó el periodismo puro y duro porque a causa de nuevas dificultades a la hora de pagar el alquiler. La empresa buscaba un perfil de agente comercial con iniciativa. Y lo encontraron. Javier Castellano es un profesional insaciable y carismático. Gracias a su ácido sentido del humor, a su personalidad arrolladora y a su ingenio ha rechazado puestos de trabajo con los que muchos sueñan. La comodidad tiene un precio.
Por Larisa García Almenara.